Me encanta las prácticas que están haciendo algunas empresas para evitar que sus empleados se queden a trabajar más de la cuenta. El otro día estuve con una gran empresa que había implantado una política de «prohibido salir tarde del trabajo». Todo lo contrario a lo que viene siendo habitual…
La cuestión es que esta empresa empezó a detectar algunos problemillas en su plantilla. Insatisfacción derivada de algunos virus empresariales que todavía quedan:
La cuestión es que esta empresa se lo tomó en serio e hizo lo que tenía que hacer con su personal de oficinas: Prohibió salir tarde.
Suena un poco extremista, incluso algo desmedido.
¿Qué ocurrió?
Además de que fue una situación muy divertida, lo que en general pasó es que la productividad aumentó un poco, la eficiencia creció y las personas hacían más en menos tiempo.
Tambíen es cierto que todo el mundo había sido formado en cómo sacar más partido del tiempo y en técnicas para organizarse mejor. De lo contrario esta medida habría fracasado seguramente.
Es lo mismo que aquellas empresas que diseñan una oficina abierta, o lo unen a cierta cultura del trabajo en silencio y de evitar interrupciones, o lo que parecía motivador acaba convirtiéndose en un gallinero.
Pero en esta empresa todo funcionó, porque formaba parte de un cambio cultural premeditado.
Es lo que tiene acotar el horario de trabajo de una persona responsable, que cumples lo que tienes que hacer en el tiempo que dispones.
Ya lo dijo Ciryl Parkinson: “Toda tarea se expande hasta ocupar el espacio de tiempo pensado para ella”.
De esta forma si trabajamos 12 horas haremos una serie de tareas y si trabajamos 8 seguramente hagamos las mismas. Sólo que en 12 horas nos permitiremos perder más el tiempo…
Podemos:
Lo que hizo esta esta empresa le hizo mejorar en varias dimensiones:
La cuestión es que todo esto es posible. Y sólo hace falta un pequeño gesto de atrevimiento por parte del empresario y la dirección para lograrlo. Las mejores empresas ya lo están haciendo ¿y la tuya?
Por cierto, una fórmula infalible que me comentó alguien consistía en hacer que la alarma se active pasados 15 minutos de la hora de salida. De esta forma nadie podría quedar en la empresa más tarde, cero excusas. Gran idea, sin duda.
¿Qué es lo que te recomiendo para conseguirlo?
O pensamos en este tipo de soluciones en términos serios o acabaremos siendo poco competitivos… e infelices. Creo que es momento de empezar a dejar de trabajar hasta tan tarde, y ser más productivos… y felices.
Que tengas un gran día.